Pase lo que pase, estoy por aquí.
Me acerco de vez en cuando a este remanso de paz que nuestro amor construyó no hace tanto, con tan pocas luces y demasiadas sombras.
Este rincón nuestro, deshabitado ahora, conserva los ecos de nuestras risas y de nuestros llantos. Pero ni los años ni los sueños rotos han podido con él, y sigue intacto.
Pase lo que pase, estoy por aquí.
Este rincón nuestro, deshabitado ahora, conserva los ecos de nuestras risas y de nuestros llantos. Pero ni los años ni los sueños rotos han podido con él, y sigue intacto.
Pase lo que pase, estoy por aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario